lunes

Cincuenta pies.

En el jardín había un ciempiés que daba vueltas en círculo, una y otra vez. Nació cojo de todas la patas izquierdas. Eso es mala suerte.
Habría seguido así toda la vida si no hubiese visto a esa preciosa hormiga. Eso es motivación.
Pero para llegar hasta ella tenía que caminar en línea recta. A los pocos días, aprendió a saltar a la pata coja. Eso es creatividad.
Se acercó a la hormiga emocionado y le declaró su amor. Ella le miró a los ojos y le dijo: ¡vete a la mierda! Eso es una putada.

1 comentarios:

Pily dijo...

Nada mejor que un ejemplo para entender las cosas. Esto es un comentario.